Mala higiene
Una de las grandes ventajas de ser rico es que puedes pagarle a alguien para que venga a limpiar tu casa tantas veces como quieras. Así que, si eres rico, ¡no hay excusa para tener una casa asquerosa! Esta historia es rara… hasta que lees que los padres tenían unos hábitos de higiene terribles. Entonces todo empieza a tener sentido.
Sin embargo, si algo me han enseñado las películas y las revistas es que los ricos organizan fiestas y cenas de lujo en sus casas constantemente. No puedes invitar gente si tus cubiertos están llenos de porquería. O al menos, puedes invitar a cada persona exactamente una vez antes de que se den cuenta de que preferirían morir antes que volver a pisar tu casa.