Un escándalo típico
Esta historia de escándalo de oficina es tan estereotipada que casi da risa. En un clásico giro escandaloso, esta persona trabajaba en una empresa en la que el dueño dejó a su mujer por su secretaria. No puede ser más cliché, ¿verdad? Sin embargo, hay una vuelta de tuerca. Su ahora ex mujer era dueña de la mitad de la empresa y no iba a divorciarse sin hacerle la vida muy, muy imposible.
Se rumorea que le hizo pagar un dineral por romper la relación. ¡Bien por ella! Esta mujer más joven debió de valer la pena, porque él empezó a hacer ejercicio, a conducir un coche deportivo y dejó la empresa para estar con ella. Ahora que lo pensamos, en realidad esto solo suena como el estereotipo de la crisis de los cuarenta.